LA IGLESIA CATEDRAL SAN JOSÉ DE GUALEGUAYCHÚ

Extraído de:”El Obispado de Gualeguaychú, su creación”.( Homenaje filial al primer obispo de Gualeguaychú, Mons. Jorge R. Chalup). 1957


Breve reseña sobre Antecedentes Históricos de la Religiosidad Gualeguaychuense

 

El origen de este pueblo está en su Capilla, denominada por eso la fundadora.

Dicha Capilla fue erigida en cumplimiento de una promesa, según una hermosa leyenda referida por el escritor copoblano José S. Álvarez ("Fray Mocho"), fundador de la popular revista "Caras y Caretas". La pajiza Capillita fundadora debió existir con anterioridad al año 1766, fundándonos para tal aserto, además de otras pruebas, en la siguiente: el año 1787 el Cabildo de Gualeguaychú se interesa ante las autoridades de Buenos Aires por una serie de necesidades de la Villa y aludiendo a la Capilla, dice: "este vecindario ha mantenido los curas a su costa durante más de 22 años, hasta que el último Señor Obispo Sebastián Malvar, proveyó con el cura que pertenece". Lo que prueba, por otra parte, los sentimientos religiosos de este pueblo, que aún en el desamparo de las autoridades virreynales y sin organización estatal alguna, se preocupaba por sus necesidades espirituales, al sostener como podía las cuestiones relativas al culto de la Fe que heredamos de la Madre Patria.

El primer sacerdote de que hay memoria en este pueblo, fue Fr. Francisco de San Bernardino, según un trabajo muy valioso del actual Cura Párroco de San José, Pbro. D. Pedro Blasón, titulado "La Iglesia de Gualeguaychú a través de más de siglo y medio de existencia". Se conserva en esta Parroquia, como una venerada reliquia, el primer libro de Bautismos y Casamientos que llevara aquel benemérito sacerdote, con datos del año 1766, siendo éste el documento más antiguo sobre la existencia de nuestro pueblo. Por eso puede decirse, con toda justicia, que la historia de nuestra iglesia es la historia de Gualeguaychú.

 

Datos interesantes de la actuación del Franciscano Fr. Francisco de S. Bernardino: la primitiva población iba creciendo al amparo del Campanario humilde de la Capilla San José. El vecindario, viéndose privado de los socorros espirituales, por la distancia desmedida que lo separaba del "Paraná de la Baxada", única Parroquia entonces existente en Entre Ríos, recurrió al celoso Obispo de Buenos Aires, Ilmo. Dr. Manuel Antonio de la Torre, de quién  se dijo: "se coronó con la gloria de no haber dejado en su Vasta Provincia (Obispado) lugar alguno escondido al celo de su caridad",  haciendo recorridos de más de quinientas leguas a caballo, embarcado, a pie, etc. y uno de sus primeros actos al tomar posesión de su Diócesis (en 1762) fue aumentar el número de Parroquias y de templos. El Obispo de la Torre envía a Gualeguaychú el primer sacerdote Fr. Francisco de San Bernardino, con el título de Teniente Cura de la Parroquia de la Baja de Paraná.

El primer Bautismo que efectúa Fr. Fco. fue el 3 de Mayo de 1766 a la niña María Josefa de la Cruz, hija  legítima de Pedro Martín Chaves y de Ignacia de Vera.

El primer Matrimonio fue el 6 de agosto de 1766: Francisco Solano Martínez con María Josefa de los Santos.

El segundo sacerdote estable en ésta fue el Domínico Fr. Mariano Amaro. Es el iniciador del Archivo Parroquial. Fue enviado por el entonces Obispo Diocesano Fr. Sebastián Malvar y Pintos desde Montevideo el año 1777.

Este extraordinario Obispo visitó estas zonas por el año 1778 y a su regreso a Buenos Aires solicita del Virrey Vértiz la autorzación como a Vice-Patrono para la creación de las Parroquias de Gualeguay, Gualeguaychú y Arroyo de la China (Concepción del Uruguay), en nota del 19 de junio de 1780. Contesta el Virrey, dando su beneplácito para erección canónicas de las nuevas Parroquias, el 3 de Julio de 1780.

 

Erección de la Parroquia: ¿Cuándo fue erigida canónicamente la Parroquia San José de Gualeguaychú? No se posee el Decreto de erección, pero consta que desde el 1º de Enero de 1782 existía el Curato establecido.

 

Curas y Párrocos de Gualeguaychú: Desde el 1º de Enero de 1782 actúa como Cura Párroco el Pbro. D. Mateo Fortunato Gordillo y López con jurisdicción sobre el territorio que ocupa  actualmente el Departamento de Gualeguaychú.

Durante el Curato del Padre Gordillo se efectúa la traslación de la población de Gualeguaychú al lugar que actualmente ocupa, informando el 20 de Octubre de 1763 D. Tomás de Rocamora haber dejado constituidas las autoridades de la población. Al final de las palabras de Rocamora, se leen las siguientes: "La Patrona de esta Capilla es la Virgen del Rosario: San José es el Compatrón. La Virgen misma es Patrona también de Paraná, para donde podía reservarse, y quedar San José de Gualeguaychú para dar nombre y tutela a su reciente Villa"....

El año 1805 el Obispo Don Benito de Lue, en un acontecimiento que fue muy celebrado por los pobladores, efectúa (en los primeros días de Abril) la primera Visita Pastoral a Gualeguaychú. Se nombra en ésta época el primer Teniente Cura (P. Miguel González). El Cura Gordillo rigió los destinos de esta Parroquia durante 41 años, hasta Abril de 1823.

 

Otros Curas Párrocos: Pbro. Cosme Damián Olascoaga (desde 1843 a 1852) Sacerdote sumamente activo y ordenado. A él se debe la erección del Cementerio Parroquial en 1843, la iniciación de la Capilla dedicada a los Santos Justo y Pastor (históricas imágenes en tallas donadas por el Gral. Urquiza) en el lugar que actualmente ocupa el Hospital Centenario. Por la gran devoción de este pueblo a las Benditas Animas del Purgatorio y por expreso pedido del Comandante D. Rosendo Fraga, se funda en esta época la Hermandad de Animas, de gran arraigo en Gualeguaychú.

 

Pbro. José María Villasante Urquiza: (1852) Celebra con mucha pompa los festejos celebratorios de Caseros.

 

Pbro. Dr. Domingo Cobos: (de 1852 a 1857) Durante su Curato se efectuó la traslación al templo interino y se comienza a recaudar fondos para la construcción de la nueva Iglesia. El P. Cobos fue un apóstol: recorrió varias veces toda la campaña gualeguaychuense.

 

Pbro. Dionisio Martínez: (1859 - 1870) Uno de los Sacerdotes de más brillante actuación en este Curato. Termina la construcción de la Capilla de los Santos Justo y Pastor, la bendice el 6 de Octubre de 1860 y comienza a planear la construcción de nuestro grandioso y magnífico templo. Juntamente con el Jefe de Policía D. Reynaldo Villar invita a caracterizados vecinos y constituye la Primera Comisión Popular Pro-Templo el 20 de Junio de 1862..

 

El P. Martínez y sus compañeros de Comisión tuvieron una clara visión de lo que sería en el porvenir la nueva ciudad de Gualeguaychú - había sido declarada tal el 4 de Noviembre de 1851- y lo demuestra la grandiosidad del plano elegido para la nueva Iglesia. El 30 de Mayo de 1863 se bendice la piedra fundamental del nuevo templo, siendo padrino el entonces Gobernador de la Provincia. Capitán General D. Justo J.  de Urquiza. Fue eminente  patriota y generoso iniciador de obras de bien, como la gran colecta del año 1862 en pro de las víctimas del terremoto de Mendoza, etc. Al fallecer tan benemérito sacerdote en Santa Fe el año 1879, Gualeguaychú reclamó sus restos que descansan en el Presbiterio de nuestra Iglesia - in cornu Epistolae. Sobre su lápida se lee "Veneración y respeto para la querida memoria de este Sacerdote Argentino".

 

Pbro. Julián de Yarza: (1872 - 1879) El 2 de Noviembre de 1877 bendijo, con gran solemnidad el actual Cementerio del Norte. Serias dificultades financieras en la construcción del templo. Auge en la Masonería.

 

Pbro. Gabriel Seguí: (1879 - 1883) Recibió en nombre del pueblo los queridos restos del P. Martínez.

 

Pbro. Luis N. Palma: (1887 - 1894) Brillante orador e inspirado poeta, el P. Palma hizo honor a la tierra de Gervasio Méndez y Andrade por su inspiración poética y el verbo arrebatador de Osvaldo Magnasco por sus dotes oratorias; pero, sobre todo, fue un sacerdote que emuló el celo catequístico del P. Cobos y la tenacidad y organización del siempre recordado P. Vicente Martínez. Se hizo cargo del Curato el 27 de Noviembre de 1887 de manos del Dr. Juan Vilar, Cura de Gualeguay. Uno de los primeros actos del P. Palma fue la reorganización de la Comisión Pro-Templo, a fin de llevar a feliz término esta gran obra que fue la preocupación del nuevo Cura. El P. Palma no se dio un momento de descanso. Suscripciones, rifas, bazares, conciertos, solicitudes a los poderosos públicos, todo lo utilizó para aquel nobilísimo fin. En 1889 obtuvo del Congreso de la Nación que se le votaran $ 40.000 para el templo y así tuvo la satisfacción de inaugurar el templo (su obra) después de 3 años de intensos trabajos. El acto de la inauguración tuvo lugar el 19 de Marzo de 1890, fiesta del Titular de la Parroquia, y en la oportunidad Palma pronunció una de sus más bellas oraciones que muchos aún recuerdan en Gualeguaychú. Colocó parte de la ornamentación del templo y en su tiempo se instalaron cinco de los altares actuales. En 1888, fue elegido diputado por el Departamento de Gualeguaychú a la Legislatura Provincial, siendo reelecto en 1892. Por aquel entonces el terrible mal que minaba su organismo, fue agravándose perdiendo a poco la vista, hasta morir en Paraná el 27 de Agosto de 1894. Gualeguaychú que tanto le quería, recibió con hondo pesar la noticia de su muerte. La Municipalidad puso el nombre del malogrado Párroco a una de las calles de la ciudad. El pueblo le erigió el hermoso monumento que se contempla en el atrio de nuestro templo. Al pronunciar el P. Palma su oración en la inauguración del templo había dicho: "Para mí solo pido un voto íntimo, la única de mis aspiraciones, el poder dormir el último de mis sueños bajo esta Cúpula sagrada". Al cumplirse los 25 años de su tránsito a la Eternidad, el pueblo, al que Palma tanto amara, recogió ese postrimer voto: trajo sus queridos restos y los depositó en el templo: in Cornu Evangelii, desde donde siguen enseñando con su ejemplo.

 

Otros Párrocos: Miguel Torres (1895 - 1900) - Tomás Garcilazo (1900 - 1905) - Miguel González y José Rebagliati (1905).

 

Pbro. José María Colombo: (1905 - 1915) Sacerdote sumamente apreciado en nuestro medio. Fue propulsor de brillantes iniciativas de progreso para el pueblo. Fue de los principales gestores de la creación del Colegio Nacional y el creador de la Escuela de Artes y Oficios (Escuela Fábrica de la Nación) que tanto bien hiciera a muchachos de familias humildes que en esa casa aprendieron un oficio que les permitió formar un cristiano hogar. Al fallecer hacer unos 7 años, se puso su nombre a una de las calles de la ciudad.

 

Pbro. D. Pedro Blasón: Desde el 21 de Julio de 1915. El Párroco de mayor permanencia al frente del Curato. De obra pastoral, callada, pero intensa. Catequista, organizador, misionero de campaña, pero por encima de todo Padre de su grey. A su iniciativa, surgieron, entre otras muchas obras: Instituciones Parroquiales como la ACA a la que dio tanto incremento con su experiencia y su entusiasmo juvenil para el apostolado; la Congregación de Hijas de María, las Conferencias Vicentinas, la JOC, la Asoc. de Profesores y Maestros Católicos. Otras benéficas como el Hogar de Ancianos y otras obras que irradiaron la Fe en los distintos barrios: Capilla Sagrado Corazón de Barrio Franco, Capilla Cristo Rey de Pueblo Nuevo, Capilla Nuestra Señora de Fátima del Puerto, Capilla San Francisco de Asís, del Tiro Federal. También se deben a iniciativas del P. Blasón la nueva Casa Parroquial, el salón Cine "Palma" la refacción y revoque del templo, etc.

 

En julio de 1955, al cumplirse los 40 años de acción al frente de la Parroquia San José, el pueblo de Gualeguaychú tributó al P. Blasón un homenaje que resultó una verdadera apoteosis del Sacerdocio, con el lema que por aquellos días se popularizó en muestro medio: "Justicia y Gratitud".

 

Porque el P. Blasón tiene el "Celo de la Casa de Dios" procuró embellecer y ornamentar el templo de Martínez y de Palma. Para ello no escatimó esfuerzos hasta lograr la adquisición de un magnífico Órgano y para las ejecuciones en el mismo, obtuvo el valiosísimo concurso del Sacerdote -  músico, Pbro. Maestro D. Desiderio Moia, quien desde 1929 a 1954 actuó en esta Parroquia como Director de Coros, Teniente Cura y celoso Confesor.

 

Los hermosos escaños que pueblan las amplias naves, los altares que las ornamentan, el Comulgatorio de mármol y el dorado templete de la Virgen Patrona, testimonian, entre tantas otras realizaciones el celo del P. Blasón por la Casa de Dios.

 

Pero, sobre todo, se evidencia en el edificio moral, de la Iglesia, en el Cuerpo Místico de Cristo. En las almas de sus millares de hijos brilla la obra callada y fecunda de "Don Pedro", como cariñosamente designan los feligreses al Patriarca del pueblo y decano del clero entrerriano.

 

Han actuado  junto al P. Blasón, entre otros, el culto historiador Canónico D. Juan Carlos Borques, el P. Cardenas, activo dirigente de Instituciones juveniles y deportivas, el hoy Canónigo Herminio Bidal, entusiasta propulsor de la ACA, el Pbro. José L. Gallina, hoy Capellán de Villa Malvina y actualmente pertenecen al clero parroquial los Pbros. Jorge Metz, Dionisio Varela y Luis Jeannot.

 

La población actual de Gualeguaychú es de aproximadamente 60.000 habitantes, pero su Departamento es el más extenso de la Provincia. De ahí que el territorio de la Parroquia San José comprende una enorme extensión de más de 110 Kms. de longitud, sin contar la dilatada zona de Islas del Ibicuy con más de 12.000 habitantes que también pertenece a la jurisdicción eclesiástica de la Parroquia San José.

 


 

Otros datos para recordar: La fecha como de la fundación de Gualeguaychú es el 20 de Octubre de 1783, en que Tomás de Rocamora comunica al Virrey Vértiz que ha efectuado, previo desmonte de 15 días de trabajo, el traslado de la población a "una legua y poco más de la antigua Capilla fundadora y primitiva población rumbo Noreste."

 

En esa Nota del 20/X/1783 decía Rocamora: "....La Patrona de esta Capilla es la Virgen del Rosario; San Joseph es el Compatrón; la Virgen misma es Patrona también de Paraná, pa. donde podría reservarse, y quedar San Joseph en Gualeguaichú pa. dar nombre y tutela a su reciente Villa".

 

No habiendo recaído resolución gubernativa sobre el Patrón, a iniciativa de las autoridades locales, se celebró el 8 de Julio de 1801 un Cabildo abierto con el objeto de elegir por medio del sufragio popular un candidato para el Patronazgo aun vacante. Por Voto Unánime de los concurrentes, se resolvió solicitar del Virrey Vértiz, que se designara a San José. El Virrey, mediante decreto del 5 de Agosto de 1801, aprobó la elección del Patrono , en el Titular indicado por el vecindario.

 

.... La historia se repite. Una vez más se hace justicia al Santo Patriarca y al deseo del pueblo. San José Patrono de la NUeva Diócesis de Gualeguaychú. "Ite ad Joseph".   

Extraído de:”El Obispado de Gualeguaychú, su creación”.( Homenaje filial al primer obispo de Gualeguaychú, Mons. Jorge R. Chalup). 1957

 

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